KOURIS Y KORAIS

Son esculturas realizadas dentro del periodo arcaico del arte griego entre los siglos VII y VI a.C. Estas esculturas eran realizadas en piedra, concretamente de mármol.

Las características comunes que presentan estas esculturas son las siguientes: Son esculturas exentas de bulto redondo, es decir, pueden ser observadas desde todos puntos de vista, eran simétricas, ambos lados son iguales, aunque se realizaban para ser apreciadas, sobre todo, de manera frontal. En estas esculturas se puede apreciar que los cuatro lados por los que las podemos observar están realizados sin cohesión, por eso presenta cuatro aspectos totalmente diferentes dependiendo de la perspectiva desde la que sea vista.

Para su creación empleaban la técnica de la talla, que consistía en eliminar poco a poco el mármol que sobraba hasta darle la forma deseada. Tenían influencia egipcia aunque a diferencia de estas los kourois iban desnudos. También mostraban una influencia cultural de creta en sus caras y cabezas.

Querían alcanzar siempre un grado máximo de belleza y naturalidad. Tanto los kourois como las korais adoptaban una postura rígida (hieratismo) aunque en el caso de os kourois intentaban dar sensación de movimiento adelantando un pie, normalmente el izquierdo. En cuanto al rostro sin expresión mostraban ojos almendrados y sonrisa arcaica, estereotipada, así como los sentimientos y emociones que están ausentes debido a esta sonrisa sin expresión, común a otras civilizaciones como por ejemplo la sonrisa etrusca, donde podemos apreciar una clara conexión con la típica sonrisa arcaica del arte griego. Presentaban una nariz griega.

Diferencias entre Kourois y Korais:

-Kourois: Siempre representaban a los hombres desnudos, jóvenes y en plenitud física como por ejemplo atletas o dioses. Pelo poco natural, largo, recto y trenzado o recogido al estilo cretense y pegado al cuero cabelludo. Brazos muy pegados al cuerpo con los puños cerrados dando una mayor sensación de rigidez. Anatomía muy marcada y poco lograda, sobre todo en las articulaciones (rodillas, codos, pectorales...)

-Korais: Figuras femeninas vestidas con una túnica larga decorada con formas geométricas y en algunos casos decoradas también con colores. Mostraban los pies juntos  los brazos más separados del cuerpo, uno de ellos extendido. Según descubrimientos se cree que estas esculturas estaban dedicadas a ofrendas para Apolo ya que algunas de ellas fueron encontradas en lugares de culto. Personifican la gracia y la elegancia.

Algunos de los ejemplares  de estas esculturas son:

• Los hermanos Keobis y Bitón, situados en el santuario de Delfos (artitas que puso gran interés en aplicar el canon matemático y orgánico).

• Kouros de Anavyssos, situado en el museo de Atenas. Podemos reasaltar algunas características importantes de esta escultura: Se trata de un kouroi con formas muy bien marcadas en el que ya n predomina el carácter geométrico de su anatomía, trasmitiendo una sensación de elasticidad, debido al equilibro conseguido con el estudio de sus relieves musculares. Las rodillas y las clavículas muestran una clara aproximación a la realidad. Por el contrario las caderas están bien marcadas y el vientre es estrecho, volviendo a hacer uso de las formas geométricas. La espalda esta menos cuidada, ya que fue creado para ser visto de frente, como la gran mayoría de estas esculturas. Muestra los brazos prácticamente despegados, con un pequeño punto de contacto con el cuerpo a la altura de las manos.

• Samos, que es el más grande conservado en Grecia y situado en el museo arqueológico de Samos.

• La Dama de Auxerre, situada en el museo de Louvre, en París y es consideradas la primera escultura de piedra exenta de bulto redondo. Podemos destacar las siguientes características: Se trata de una pequeña escultura de 55cm de altura aproximadamente. En ella se puede apreciar una curiosa disposición de los brazos que la hace única, la mano derecha esta colocada sobre los pechos, en un intento de resaltarlos o también puede ser una postura ritual ya que este gesto aparece en las pequeñas esculturas cretenses, mientras que la mano izquierda se extiende pegada a lo largo del cuerpo, de una forma más tradicional. Cabe destacar que muestra una forzada rigidez que se debe a que guarda la forma del bloque de piedra original en el que fue elaborada y la enorme desproporción de formas, muestra las manos muy grandes comparadas con el antebrazo al igual que los pies.

  Noelia Pérez y Patricia Gil